Mentiras en el paraíso
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| Rachel Dolezal: blond, white child. |
Existen en Estados Unidos unos grupos extremos, racistas por contraste, a veces grotescamente cómicos, que defienden como alegato único el peligro que se avecina para los arios por razón de la mezcla de etnias, sangres o colores. Estos activistas del concepto de White Nation están hoy de enhorabuena gracias a las picardías de Rachel Dolezal, una mujer que llegó a denunciar hasta "nueve crímenes de odio racial en un periodo de diez años por su pertenencia a una raza", sin encontrarse nunca pruebas ni sospechosos.
En España proliferaron los que se hicieron pasar por hijos de represaliados del franquismo, por presos en campos de concentración nazis, por luchadores por la libertad en una clandestinidad tan clandestina que nadie lo supo ni en su casa, por fieros intelectuales de izquierda ocultando que fueron a colegios de pago y ahora llevan a sus hijos a las clases con monjas, por victimas del 11-M. La gran fábrica occidental de la picaresca era España. Algo está cambiando.
La bomba de racimo que ha dejado ojiplática a la nación más poderosa del mundo, y que tiene al Ku Klux Klan sumido en un cólico por risión, estalló de la mano de Rachel Dolezal, lider de la NAACP en la marcha sobre Washington. La National Association for the Advancement of Colored People es una institución con más de 106 años de existencia. La familia desató el escándalo al declarar que llevaba años simulando ser negra.
Rachel Dolezal, de 37 años, preside la sede de la NAACP en Spokane y trabaja a tiempo parcial en el departamento de Estudios Africanos de la Eastern Washington University. Su prestigio como activista en defensa de los derechos civiles en Inland Northwest era incuestionable. Era vocal en la Comisión del Defensor del Pueblo local anexa a la Oficina de Policía. En la solicitud de admisión se presentó como "white, black and American Indian" y en los blogs vinculados a su activismo relataba "como ser negro en la America del Inlander" (zona de Washington donde reside).
Muchos de los seguidores de los grupos partidarios de la supremacía blanca son individuos de nula formación académica, que compiten con hispanos y negros por los mismos puestos de trabajo, en los estratos sociales mas pobres (como los rednecks en la América rural). La indignación de estos colectivos se multiplica tras ser testigos de cómo Rachel lamentaba lo duro que era para una mujer negra lograr un empleo.
Muchos de los seguidores de los grupos partidarios de la supremacía blanca son individuos de nula formación académica, que compiten con hispanos y negros por los mismos puestos de trabajo, en los estratos sociales mas pobres (como los rednecks en la América rural). La indignación de estos colectivos se multiplica tras ser testigos de cómo Rachel lamentaba lo duro que era para una mujer negra lograr un empleo.
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| El mundo de Rachel |
Su familia identifica a su madre como una mujer blanca de ascendencia europea. La propia madre, Ruthanne, lamenta como su hija no ha querido ser "ella misma" y lleva disfrazándose de mujer negra desde el año 2006, fecha en que la familia adoptó a cuatro niños negros. La madre reconoce su interés por la causa pero cuestiona los métodos. Su padre, Lawrence, narra como se integró en la Universidad de Belhaven un grupo en favor de la "racial reconciliation". Su posterior paso por la Howard University, una institución de marcado perfil afroamericano, acentuó su pertenencia a la causa. En su ingreso a la academia de arte presentó exclusivamente “African American portraitures." La escuela se convenció de que se trataba de una mujer negra y recibió una beca completa.
Su integración en la comunidad negra le llevó a no querer visitas de su familia por ser caucásicos (en concreto, portan sangre de suecos, polacos y alemanes). Cuando sus padres discutían su proceso de despersonalización, el desprecio de sus orígenes, ella alegaba que "todos venimos de Africa". La disputa parece haber surgido tras una reclamación de Rachel a su familia blanca, a la que demandó por abusos para arrebatarles a su hermano adoptivo de 21 años, Izaiah. El joven vive ahora con ella. Rachel lo hace pasar por su hijo.
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| Dolezal´s parents |
Su integración en la comunidad negra le llevó a no querer visitas de su familia por ser caucásicos (en concreto, portan sangre de suecos, polacos y alemanes). Cuando sus padres discutían su proceso de despersonalización, el desprecio de sus orígenes, ella alegaba que "todos venimos de Africa". La disputa parece haber surgido tras una reclamación de Rachel a su familia blanca, a la que demandó por abusos para arrebatarles a su hermano adoptivo de 21 años, Izaiah. El joven vive ahora con ella. Rachel lo hace pasar por su hijo.
Un periodista de KXLY, Jeff Humphrey, apretó las tuercas a Rachel Dolezal al mostrar una foto de un hombre negro que ella presentaba como su padre. Rachel insistió en que ese hombre era su padre. Al ser repreguntada apartó el micrófono y se fue.
La historia, que contiene elementos propios de un caso clínico de orden psiquiátrico, también retrata la deriva del modo de vida norteamericano, donde las presiones de influyentes grupos llevan a una reconstrucción de la sociedad y sus valores, instando a una ingeniería multirracial de su ciudadanía, a la asunción sistemática de unos cánones preestablecidos como superiores, ya bien en el campo de la igualdad de género, de la raza, de la multiculturalidad obligatoria, o en el campo de la transexualidad, de la forma de hacer predominar una nueva clase de familia, de la persecución de las religiones, llegando a tomar partido en materia de cambio climático, modelo económico y defensa. ¡Al final va a tener razón Juan Manuel de Prada con lo del Nuevo Orden Mundial!
La historia, que contiene elementos propios de un caso clínico de orden psiquiátrico, también retrata la deriva del modo de vida norteamericano, donde las presiones de influyentes grupos llevan a una reconstrucción de la sociedad y sus valores, instando a una ingeniería multirracial de su ciudadanía, a la asunción sistemática de unos cánones preestablecidos como superiores, ya bien en el campo de la igualdad de género, de la raza, de la multiculturalidad obligatoria, o en el campo de la transexualidad, de la forma de hacer predominar una nueva clase de familia, de la persecución de las religiones, llegando a tomar partido en materia de cambio climático, modelo económico y defensa. ¡Al final va a tener razón Juan Manuel de Prada con lo del Nuevo Orden Mundial!
