La vida es nazi, autoritaria, caprichosa, impia. Puede hacer al ser mas aleatorio emblema de la condicion de reina y madre. La igualdad no existe y su reflejo es el de una devastadora leccion evolucionista que nos repite dia a dia. Llena eres de gracia, Maria, porque place al ser oculto.
Aun en la derrota, el recuerdo del gesto vencedor persiste inmaculado en unos pocos. Unos seres se debaten en la miseria cotidiana, plenos de virtud y vacios de recompensa; otros, sencillos, pasean la marca de la raza perfeccionada y la belleza beatifica por todo el globo, sin el atisbo de una mera ruina infinitesimal, ajenos a los millares de litros, de lagrima y sangre, que se vierten en ignotas tierras baldias.
La falacia de la igualdad del hombre encuentra en Maria un bastion imperterrito, su atico inexpugnable. Si vence, lo hara sin afliccion; si pierde, no dejara recuerdo alguno de infraccion a su majestad. Venus y Lindsay han recorrido los surcos del arado romano, en el centro de su pista. Con aleteos de cisne, concurre en su gracia, llena eres, Maria.
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