domingo, enero 15, 2006

Mierdas sin fronteras

Hay que sentirse muy solido, muy libre y muy protegido para llamar hijo de puta a un colectivo tan importante y que, encima, no te despellejen en la plaza pública ipso facto. A mi los militares me la pelan. Creo que la mayoria no se gana el salario y los oficiales viven de puta madre. Pero que pueda alguien insultar, en un medio financiado por el poder catalán, y que no se te caiga el pelo en 10 minutos, dice mucho del control de ciertos grupusculos sobre los mandatarios de esa región tan diminada por catetos. La COPE tiene la culpa, claro.

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