viernes, septiembre 05, 2008
Drunk skinny runner
Crisis
Solo se ha permitido un capricho la ilustrada Bibiano. Ha cambiado (contraviniendo una Orden Ministerial del 99) el color amarillo obligatorio de todo logotipo o escrito institucional por el malva para darle un toque feminista. Como la Chacón con los uniformes, un gasto de hoy puede ser un ahorro de mañana. Adecuará los uniformes de las Fuerzas Armadas a la morfología del cuerpo femenino (: la pollez esa de cono...)
A su vez, José Bono, con su recién estrenado look peludo, ha anunciado que va a proponer a sus señorías congelarse el sueldo. Aseguran los propios socialistas a Garganta Profunda de El Semanal Digital que a Bono, de la intensidad de su propósito, le ha aparecido pelo, como por arte de magia, en el frontispicio en cuestión de unos meses.
Mas al sur (no hablo de los huevos de Bono), el alcalde de Sevilla nombra a una ex cuñada en Urbanismo sin ser licenciada. La ex cuñada del alcalde de Sevilla, el socialista Alfredo Sánchez Monteseirín, ha sido nombrada recientemente directora en la Gerencia de Urbanismo del Ayuntamiento sin que reúna los requisitos básicos para ocupar un alto cargo en este departamento: un título de grado superior. Lo hace para ahorrar. Sus ganancias anuales solo serán superiores a los 100.000 euros brutos. Se trata, de hecho, del tercer sueldo más alto de esta delegación por detrás del gerente y del director técnico. Y todo ello, sin tener un título de licenciado.
Sáez fue cuñada del alcalde por ser esposa precisamente de Francisco José Ramírez -hermano de la primera mujer de Sánchez Monteseirín-, del que ayer se informaba en ABC por su pasado como director del Instituto del Taxi tras haberse modificado una convocatoria facilitando su acceso sin ser licenciado. No debemos ser clasistas. No son licenciados ni Montilla, ni Corbacho, (¿ni Aido?) ni Pepe Blanco (su CV cabe en el canto de un dedal); y el pais va muy bien a pesar de Bush, las subprime y el petroleo disparado.
Otro procer de la tesoreria es este señor. Garzón, ese gran juez que tambien ahorra. Aborda temas de hace 70 años y en territorios extranjeros pero debe ser porque tiene patrocinador que paga los gastos. ¿Verdad?. Un product placer bastante delgado. ¿Lo pillo?.
martes, septiembre 02, 2008
Sentido, paciencia, peso, Michelet.
He rechazado empleos por esto pero creo que debo rechazar EL EMPLEO en si. Estoy tan desubicado que planeo sobre esa reedición que hace Ikusager (editor Ernesto Santolaya) de Jules Michelet, y La historia de la Revolución.
Y dijo George:
"América tiene esto. El asedio no para. Asedio como enfermedad. Y sientes mas obsesivamente el abandono. Lleva sin sonar un mes el llamador y he celebrado la fecha en solitario. Solo la santa. LA SANTA.
miércoles, agosto 27, 2008
+ sobre la memoria y el olvido: García-Alix.
viernes, agosto 22, 2008
Suicidarse y si morir en el intento: teorias mas allá de Durkheim
Suicidarse por no tener trabajo o por tener uno. Estudiar lo de “nada cuesta más trabajo, que vivir sin trabajar”. El suicidio andaluz.
Cotiza a la seguridad social para lograr pensión y al ver que no llega, se mata. Señorito castellano de Salamanca, Burgos. No se puede vivir sin cash, sin camisas impecables.
La idea maravillosa de Judas como enviado real de Dios que perpetró Borges (en Tres versiones de Judas[Cuento. Texto completo]) El gigante ciego logically proves Judas to be the Son of God as a hyperbolic way to debunk dogmatic adherence to accepted interpretations of the Gospel Story. El suicidio es el mayor esfuerzo, el mas puro sacrificio por la humanidad.
Sobre todo, en un sentido muy amplio, uno se mata para descansar. Ante el tabú que se consuma, I mean que el disgusto familiar por semejante estigma, se escoge entonces un suicidio a largo plazo. Uno se va abandonando poco a poco. No come, no se toma bien la medicación o se mezcla con vino o se producen muchas ingestas en ayunas. El footing en plena ebriedad tiene mérito pero mas aún las pesas severas hasta las cejas de Protos o Muga, y valium. Un poco de clase.
Hay un patetismo del que me considero pleno campeón. Me mato pero es que no he dejado nada al mundo para que a posteriori valore el desastre que supone mi ausencia, cómo no me valoraron. Un suicida tiene su vanidad. Que lastima y que risa. La de comedias que existen ahí. Y es que es al reves: te matas porque no haces nada bien. El fracaso o se asume o se finiquita.
Otra sabia opción: el suicidio por gasto. Uno supone un gasto para la sociedad, la familia, el orbe. Inconveniente: matas a la familia por el disgusto. Entonces, esperas a que muera el miembro de la familia que mas puede verse afectado y obras en consecuencia.
Hay una fase muy honesta en el suicidio: uno debe morir antes en la memoria de todos. Nadie debe acordarse de que uno existió antes de proceder. Debes no recibir llamadas, o estimular recuerdos en conversaciones ajenas, convertirte en un fantasma lejano, sin facciones previsibles. Ese proceso es agotador para el suicida y lleno de tentaciones. Se produce lo inverso. Uno tiene a sus seres mas queridos muy cerca en la cabecita.
Que te quede claro: nadie fuera de la familia va a lamentar tu óbito voluntario. Ocupas su cerebro un instante. Compensan su mala gestión de tu ejecutoria con una sobrevaloración de todo lo tuyo (era mas bueno..., mas blablabla) y adiós. De ahí viene la idea de masacre. Cuando uno ve que todo eso es así, que eres un nada en la nada, te rebelas. Me llevo a todos por delante. Pero eso es tan cansado. Y el mayor riesgo de todos: puedes fallar.
Solución. Mátate disfrutando. Sin que nadie se de cuenta. Es normal querer morir si no tienes hijos, ni dejas en el paro a mil personas, etc. Entonces donas casi todo lo tuyo a quien proceda y empiezas a talar discretamente tu tallo, con un cortauñas. Mátate con simpatía, con estilo. Si puedes joder a alguien en el proceso, pues mejor. Amanecer en la cama sin poder levantarte, sonriente de gusto y tieso como la mojama, con Federico de fondo, Julian Rios en el DVD, un albariño en la mesilla, y la biografia de Samuel Johnson acabadita recién. Pues eso. Vale. Judas.
There seemed a certainity in degradation. -T. E. Lawrence: Seven Pillars of Wisdom, ciii
Ayuno y Foster.
miércoles, agosto 13, 2008
This is the end, my friend
lunes, agosto 11, 2008
Jose Maria Cervelló. RIP.
Hablar del amor es muy difícil porque todo esta dicho y se puede caer en toda clase de topicazos y tonterías.
Voy a intentar hablar de sus consecuencias.
Hace tiempo leí una teoría que me impactó y voy a intentar recordar (pese a no ser un experto en esta materia):
Los hombres no somos sujetos sino instrumentos de otra cosa que es la vida y su transmisión.
Veamos: el ADN sale de nosotros cuando estamos vivos y por medio de un espermatozoide fecunda un óvulo de un ser vivo. Cuando los padres mueren, son cenizas, pero hay una parte suya que sigue viva en otra persona, y así sucesivamente.
El objetivo esta cumplido: el ADN sigue y nosotros estamos muertos.
La vida sigue y nosotros no hemos sido más que un eslabón de la cadena, aunque algo nuestro siga vivo.
En la evolución de la especie humana primero apareció el instinto de reproducción al que siguió el placer sexual como estímulo.
No sé si el amor estaba desde el principio o apareció en un momento posterior del desarrollo cerebral. En todo caso, el amor es un sentimiento que radica en el cerebro.
Tenemos, pues, un procedimiento físico-químico, por una parte, y el amor como sentimiento controlado por el cerebro, por otro. Hay instinto y cerebro, como casi siempre.
En el principio de los tiempos surge algún tipo de matrimonio y con los hijos, la familia.
¿Qué pasaba en España en 1950?.
1-El matrimonio era religioso, con algunas excepciones civiles, mal vistas socialmente. Se rige por el derecho canónico, siendo indisoluble y sólo cabe la anulación.
2-Los hijos habidos fuera del matrimonio eran ilegítimos, con derechos casi inexistentes. Además había una clasificación pormenorizada y vejatoria según la situación de los padres. Jamás entendí que culpa tenían esos hijos.
3-La mujer casada no tenia, prácticamente, capacidad civil patrimonial.
4-Si la mujer casada cometía adulterio, estaba penado. Si era el marido, no era delito.
5-Los malos tratos quedaban en casa; había una especie de presunción de inocencia que podía llegar hasta el asesinato, siempre a favor del marido.
6-Los anticonceptivos no existían en España.
7-El aborto estaba penalizado.
8-Hubo modificaciones en el régimen civil de la mujer (1958) y sobre el acceso a nuevas profesiones (años sesenta), quedando muchas profesiones vetadas a la mujer.
La gran modificación de la Constitución de 1978:
La gran modificación vino con la constitución de 1978. De forma tácita a su entrada en vigor, y con todo el desarrollo legislativo posterior y los efectos de la entrada de España en las instituciones europeas.
Hasta llegar a la SITUACIÓN ACTUAL:
Si hemos sistematizado la situación en 1950, vamos a ver que ha pasado y cual es la situación ahora.
He puesto números que, en lo posible, se corresponden, para hacer más fácil la comparación.
1-El matrimonio canónico y civil está en plan de igualdad.
Se ha regulado el divorcio y, últimamente, el llamado divorcio express.
2-Los hijos son todos iguales sin que haya discriminación.
3 y 4- Hay igualdad entre el hombre y la mujer.
5-Ha habido un cambio radical en la legislación y en la reacción social en cuanto a los malos tratos.
6- El aborto está despenalizado y se anuncia una reforma más permisiva.
8-Como se ha dicho, hay igualdad entre ambos sexos y la mujer puede acceder a todas las profesiones.
9-Muchas barreras han caído, pero sigue habiendo tareas por hacer.
Por cierto, aprovecho para hacer una rectificación. En un articulo elogié a la Ministra de igualdad llamándola paisana. Hoy quiero matizar, somos de la misma provincia, pero ella no es de Cádiz y mucho menos de Cádiz, Cádiz.
ALGO SOBRE EL AMOR:
Creo que hay que recurrir a mi primer artículo y considerar que el amor es un sorteo más, aunque con un poco de margen de maniobra.
El amor hay que trabajarlo todos los días.
Dos personalidades diferentes conviviendo, tienen que ir acoplando sus cesiones para hacer una personalidad común, sin que cada una renuncie a lo esencial de ella misma.
LOS HIJOS:
Como no tenemos hijos y no me gusta hablar de cosas sobre las que no tengo experiencia, voy tratar solo de lo que es observable.
De acuerdo con el tipo de situaciones podemos hacer la siguiente lista:
-Hijos de familia católica o civil. -Hijos de familia numerosa o hijos únicos. -Hijos de madre soltera, conociendo al padre o sin conocerlo, y demás variantes. -Hijos de padres divorciados y vueltos a casar o no; con hijos de matrimonios anteriores, y con hijos comunes etc. -Hijos huérfanos de padre, de madre o de ambos. -Hijos adoptados. -Hijos de padres homosexuales y todas sus variantes: adoptados, por inseminación etc.
¿Alguien podría asegurar de donde saldrían los hijos mejor formados y más felices?
Volvemos a los sorteos y no se cuanto margen de maniobra tendremos.
Quiero decir algo sobre los hijos de padres divorciados (aunque sean obviedades). Lo fundamental es el interés de los niños, que son responsabilidad absoluta de los padres y que nunca termina. Los niños no tienen ninguna culpa de las desavenencias de los padres.
Lo que veo peor es la judicialización de los asuntos que impliquen a los hijos. Si los niños pasan unos años cruciales implicados en todas esas tensiones y presiones ¿Cómo serán al llegar a los 18 años? ¿Quién será el responsable?
Como siempre, cuanto más pienso, más preguntas me surgen.
Por cierto, ya que estamos hablando de estas cosas… habrá algún prudente lector que sepa decirnos que es el AMOR….
FIN
Paisajes perfectos
lunes, julio 21, 2008
Carlos Rodríguez Braun sobre Gabriel Jackson
El historiador Gabriel Jackson, un darling del pensamiento único, afirma en El País: "el mercado no se preocupa por el destino de los individuos". Y añade: "el mercado, si no se regula, es completamente amoral...la competencia de mercado decide qué productos son los más atractivos para los consumidores...la crisis de las hipotecas basura...es un ejemplo perfecto de la amoralidad del mercado".
Es característica de los enemigos de la libertad la negación de la responsabilidad individual. Así, los individuos no pueden preocuparse por su destino, porque son obviamente irresponsables. Entonces, "el mercado" es visto como una entidad separada de las personas, a la que se adjudican toda suerte de deficiencias, para no tener que confesar abiertamente la tesis fundamental: como la gente es idiota, alguien tiene que preocuparse por ella. No pueden ser libres (o sea, el mercado) y por tanto es la alternativa la que vale, y la alternativa de la libertad es la coacción. Quienes deben preocuparse por el destino de los individuos no pueden ser los individuos libres, con lo cual el protagonismo debe ser para quien encarna la coacción: el poder político y legislativo.
Para sostener una tesis tan paternalista, repito, hay que despreciar al individuo, que no es capaz de elegir lo que le resulta más atractivo consumir. Como en realidad no es libre, sus decisiones no pueden ser morales, porque la moral es siempre voluntaria. Eso es lo que quieren decir los enemigos de la libertad cuando dicen que el mercado –o sea, la gente libre, la única que puede tener y tiene sentido moral– es amoral.
Si la libertad es amoral, entonces su opuesto es quien está provisto de sentido moral. Y de ahí la conclusión de que el Estado es quien encarna la ética. Tan disparatada noción debe ser acolchada por la ficción de que todo contratiempo es derivado de la libertad. Así, cuando aparecen los problemas en unos regímenes bancarios regulados públicamente dentro unos sistemas monetarios monopólicos y públicos, la corrección política corre en busca del obvio culpable: el mercado, es decir, la libertad.
jueves, julio 17, 2008
miércoles, julio 16, 2008
Rif 1921
martes, julio 15, 2008
Wordsworth para Amaya.
¿QUÉ ES OCCIDENTE? de Philippe Nemo. Gota a Gota. Reseña de Marco
Pues bien, no es verdad. A pesar de la casta de mandarines y caciques surgidos de las escuelas de políticos funcionarios, a pesar del conservadurismo y del miedo de los franceses, a pesar de la corrupción de la República sigue habiendo liberales en Francia, y el liberalismo sigue dando frutos en una tierra en la que siempre tuvo arraigo.
Tenemos ahora una nueva prueba en el libro, mejor dicho panfleto, aunque razonado, que acaba de publicar la editorial Gota a Gota. Se titula ¿Qué es Occidente? y su autor es Philippe Nemo, profesor y estudioso de las ideas políticas. En España se han publicado de él Job y el exceso del mal (1995), un ensayo a partir de la gran reflexión del francés Emmanuel Lévinas sobre el significado de "pecado original", y otro trabajo más breve, pero enjundioso, sobre la oligarquía de la V República francesa.
Philippe Nemo también es el responsable de la edición de una monumental historia del liberalismo europeo, que saldrá en Francia dentro de unos meses y renovará bastantes perspectivas.
Como se ve, no es hombre falto de ambiciones. El solo título del libro ahora publicado en español indica que no se va a rendir. Se lo agradecemos.
No estamos ante una divagación más sobre un término particularmente confuso. Este panfleto no es una nueva lista de valores y convicciones, ni otra glosa sobre reflexiones anteriores ni, menos aún, un lamento elegíaco. Nemo propone, ni más ni menos, una definición de Occidente.
En los cinco primero capítulos el autor describe los cinco acontecimientos históricos que han hecho de Occidente lo que es, a saber: la invención de la ciudad, de la libertad bajo la ley, de la ciencia y la escuela (con los griegos); la invención, por los romanos, del derecho, de la propiedad privada, de la persona y del humanismo; la revolución ética y la invención del tiempo histórico que trajo la Biblia; lo que llama la "revolución papal" de los siglos XI y XII, que es la síntesis de los tres hechos anteriores –Atenas, Roma y Jerusalén– y que rescata para la Iglesia Católica parte de lo que muchos historiadores han atribuido a la Reforma; y, finalmente, la promoción de la democracia liberal.
Aplicando estos criterios rigurosamente, resulta una geografía de Occidente muy precisa, más de la que Huntington trazó en El choque de civilizaciones. La conforman los países que han vivido los cinco acontecimientos (los antiguos quince de la actual Unión Europea, salvo Grecia), además de las democracias anglosajonas (Estados Unidos, Canadá, Australia y Nueva Zelanda). Cerca, pero no en el núcleo duro, están los países del este de Europa, donde no hubo revolución democrática, los hispanoamericanos e Israel. En el otro extremo están los países dominados por el Islam.
Nemo no niega la vocación universalista de Occidente en aras del multiculturalismo. Países no occidentales como Japón o la India han demostrado que los valores occidentales son transmisibles, adaptables y fecundos en otras circunstancias. Pero tampoco oculta las diferencias en aras de un mestizaje universal. Como no se hace ilusiones –con razón– acerca del fin de los conflictos, argumenta que más vale tener claras las ideas para entablar un diálogo en profundidad, no un simple intercambio de cortesías vanas, y menos aún un suicidio como el que preconiza el Gobierno socialista español.
Por eso mismo, Nemo se atreve a proponer, al final, una idea original. Se trata de la creación de una Unión Occidental. Sería algo distinto de la Unión Europea indefinidamente abierta que hemos conocido hasta ahora y ya ha entrado definitivamente en barrena. También sería algo distinto a cualquier tipo de zona controlada por una supuesta hegemonía norteamericana.
La Unión Occidental vendría a ser la alianza de un conjunto de países que comparten una identidad cultural esencial, un "espacio institucionalizado de concertación y coordinación, una libre República de países iguales en derechos".
¿Pura utopía? En parte sí, pero propuestas arriesgadas como éstas tienen la virtud de devolvernos a realidades esenciales: la necesidad de saber quiénes somos, si queremos defendernos, y cómo apuntalamos la base sobre la que se ha construido Occidente: la libertad.
Como el panfleto es corto, está bien escrito –sin los amaneramientos del francés actual– y bien traducido, se lee de un tirón. Y le hace a uno soñar con lo que podría llegar a ser, con los medios de que disponemos hoy, un Occidente dispuesto a promocionar los valores liberales, que son los suyos.
José María Marco
viernes, junio 27, 2008
El genio del cristianismo
- Bellezas de la religión cristiana
- Autor: Chateaubriand
- Trad.: Manuel M. Flamant
- Editorial: Ciudadela Libros
- Colección: Ensayo
- Precio: 29,50 €
- Páginas: 624
lunes, junio 23, 2008
Armytimes.com
- Standing weighted arm raises Standing weighted arm raises challenge the abs from a static standing position. Select one or two light dumbbells (5 to 15 pounds.) and stand with your feet shoulder-width apart. Brace your stomach as if for a punch. At the same time, squeeze your glutes and tuck your pelvis under and forward — this is essential. Squeeze the handles hard and hold your body very tight. Exhale tightly, making a hissing sound as you lift the weights with locked arms out in front of you to shoulder level or straight above your head. This movement must be done slowly and under control with maximum tension. Lower the weights to the starting position with the same breathing and control. You will feel the burn immediately. Now raise the weights with locked arms to the side to shoulder level or above the head with the same breathing and tension. Lower in the same manner. Perform three to five sets of three to five reps each. Relax and breathe between sets for about one minute. For a more advanced version, lift the weights above your head to the front and lower them to the side. Then reverse the movement.
- The hot potato The hot potato places a more dynamic load on the muscles. Hold a medicine ball or a kettlebell hand weight (picture a cannonball with a handle) in one hand in the "rack" position — the weight at your shoulder, your arm tight to your side. Stand with your feet shoulder-width apart and maintain the same ab and glute tension as above. In a slow, controlled motion, transfer the weight to the other hand and repeat. You should feel your abs fire to accept the weight. Next, gently toss the weight from hand to hand, starting with your hands close together and moving slowly farther apart — no more than 12 inches. Add weight to increase the difficulty if desired. This drill can be done for many reps. The general guideline is to rest when your form begins to deteriorate. Three to five sets is a good goal. Nate Morrison is an Air Force pararescueman staff sergeant. He is a military fitness expert and founder of the online magazine www.milfitmag.com.